Conocer las partes del cuerpo, su funcionamiento y cómo éstas forman parte de un sistema articulado, es un desafío que el niño deberá ir superando en cada etapa del desarrollo por lo que un acompañamiento nutritivo podría marcar la diferencia entre una autoestima positiva y una deficiente.
El cuerpo siente y expresa las emociones a través de movimientos y actitudes. La sonrisa ilumina la cara, la rabia nos aprieta y el miedo nos mueve a escondernos.